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miércoles, 13 de noviembre de 2019

LIMONCELLO

Ya tenía ganas de enseñaros esta receta. La descubrió mi hijo mayor, que está hecho un cocinillas, y un día que fuimos a su casa lo probamos y la verdad es que nos encantó. La he hecho varias veces y he ido mejorandola poco a poco. Como el Limoncello original no queda, pero se aproxima bastante, y todos los que lo han probado les encanta.
No es nada complicado de hacer, ni tampoco requiere tener una destilería en casa, sólo paciencia. Os aseguro que si lo hacéis vuestra familia y amigos os van a hacer la ola.




INGREDIENTES: (para 1 litro)
- la piel, sin nada blanco, de 3 limones grandes o 4 medianos
- 600-700 ml de vodka
- 1 litro de agua
- 500 gr de azúcar
- el zumo de 1 limón

PREPARACIÓN:
1- Lavar bien los limones, pelarlos con un pelador de verduras, para que saquemos la cáscara sin nada blanco.

2- Meter las cáscaras en un bote grande de cristal. Añadir el vodka, cerrarlo bien y dejar fermentar en un lugar oscuro 3-4 semanas. Las cáscaras tienen que quedar blanquecinas y el vodka irá cogiendo un color amarillento.



3- Pasado el tiempo, ponemos el azúcar y el agua en un cazo y cocemos hasta que hierva. Tiene que quedar un almíbar un poco espeso. Dejamos enfriar.

4- Vertemos el vodka del frasco en una botella de litro, quitando las cáscaras. Añadimos el almíbar frío.

5- Exprimir 1 limón, colamos bien el zumo poniendo una gasa o un trapito bien limpio en el colador. Añadimos el zumo al licor. Dejamos reposar en la nevera 1 semana.

6- Rectificar al gusto: si nos gusta más fuerte le podemos añadir un poco más de vodka, o si nos gusta con más sabor a limón, le podemos añadir el zumo de otro limón. A vuestro gusto.

NOTAS:
- Para las primeras pruebas he utilizado un vodka normalito. La verdad es que queda bien. Ya si queréis ser más exigentes os podéis gastar el dinero en un buen vodka u orujo blanco, pero sinceramente no merece la pena.
- Para saber cuándo debéis añadirle el almíbar: podéis poner una etiqueta con la fecha en el frasco o apuntarlo en el móvil.
- Puede que os parezca mucha cantidad de azúcar (la receta que me pasó mi hijo pedía más azúcar), pero os aseguro que no queda muy dulce. Pero si al probar la mezcla notáis que está dulce para vuestro gusto, añadid un poco más de vodka o de zumo de limón.
- Colar bien el zumo de limón para que no queden restos de pulpa.
- Para guardar vuestro licor: la nevera o en el congelador. Tranquilos que no se va a congelar, lleva tanto alcohol que será imposible que se congele.
- Con la receta base podéis hacer otros licores: de cerezas, de naranja, etc. Yo ya he probado uno de cerezas.

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