Seguro que te ha pasado alguna vez: ¿Mamá, qué hay para cenar? Y yo: ni idea. Así que abres la nevera y miras y miras y encuentras huevos, leche, un trozo de beicon, y, de pronto, se te enciende la bombillita del cerebro y das con la solución. Voy a preparar una estupenda quiche que hace mucho tiempo que no la hago.
La quiche de hoy es la más conocida: la quiche Lorraine. Con pocos ingredientes podéis tener una estupenda tarta salada que, como a mí, me sacó de un apuro.