jueves, 8 de febrero de 2018

MIGAS MANCHEGAS

Las migas son un plato muy antiguo. Ya durante la invasión árabe se tiene constancia de este plato. Poco a poco se fue extendiendo y con el tiempo se convirtió en un plato que se asociaba sobre todo a los pastores, ya que es un plato contundente.
Buscando información sobre su historia encontré un hecho curioso: a finales del siglo XIX pasó a ser el desayuno de los soldados en los cuarteles y academias militares. La tradición de preparar migas se ha mantenido en los pueblos, y no sólo se elaboran con miga de pan, sino también con harina, dependiendo de la zona. Actualmente se han vuelto a poner de moda, e incluso las ponen de tapa en bares de tapeo.
Yo siempre he comido las migas de pan, ya que mi madre era de un pueblo de Toledo y es un plato que en invierno se prepara, aunque en verano también las he comido.
Nunca las había preparado, tampoco tenía la receta completa, sólo recuerdos. Así que se la pedí a un familiar, muy cocinillas él. Me imagino que esta receta es la que hace su madre y la que hacía mi abuela.
Cuando las estaba haciendo me han venido a la mente un montón de recuerdos de mi infancia, de cuando íbamos al pueblo a ver a la familia de mi madre. El olor de la lumbre encendida... el día antes mi abuelo con una paciencia infinita cortaba el pan y lo troceaba. Mi abuela, sentada en su gran silla al lado de la lumbre y con una gran espumadera, removía sin parar las migas. A los ojos de una niña aquella sartén era enorme, sobre la trébede. Luego todos nos reuníamos en torno a la mesa y nos metíamos entre pecho y espalda esa enorme sartén. Esos recuerdos nunca se irán.
Es una receta fácil de elaborar, lo único que necesitaremos sera un pan de buena calidad, a ser posible tipo candeal o torta, un buen aceite y, sobre todo, una gran sartén, tipo paellera.